Se fundó Hábitat para la Humanidad de Central Lane en 1990 como una filial de Hábitat para la Humanidad Internacional. Estamos profundamente comprometidos con la creencia de que todo el pueblo de Dios merece un lugar decente y asequible para vivir. Trabajando con individuos y familias, voluntarios y simpatizantes dedicados, construimos hogares, comunidades y esperanza.
Con nuestro programa de construcción de viviendas, las familias de bajos ingresos invierten en su futuro con mucho trabajo duro, conocido como “Contribución Tiempo y Trabajo”. Antes de mudarse, las familias completan un mínimo de 200 a 250 horas de “Contribución Tiempo y Trabajo” (dependiendo de la configuración de la familia). Después de que los voluntarios construyen la casa, nuestras familias compran su casa con un préstamo sin fines de lucro a bajo interés. Sus pagos hipotecarios mensuales vuelven directamente a la misión de Hábitat, permitiéndonos brindar la misma experiencia de cambio de vida para otra familia. Cada familia asociada recibe apoyo continuo a través de la educación y la tutoría.
También nos enorgullecemos de la preservación de nuestros vecindarios comunitarios existentes. Nuestro programa de reparación de viviendas trabaja con veteranos de bajos ingresos, ancianos y/o propietarios discapacitados que necesitan reparaciones menores en el exterior de la vivienda. Al devolver estos hogares a un estándar decente y habitable, nuestras familias pueden quedarse en casa en un ambiente cómodo, seguro y familiar.
Desde nuestra fundación, Hábitat para la Humanidad de Central Lane ha construido 74 viviendas y ha realizado más de 50 reparaciones. También ofrecemos apoyo a nuestro socio global afiliado en Nicaragua. Damos la bienvenida a personas de todos los ámbitos de la vida para que se asocien con nuestro programa para servir a las familias necesitadas con generosidad, humildad y amor.
NUESTRA GENTE
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NUESTRA VISIÓN
Un mundo donde todos tengan un lugar digno para vivir.
TODOS SON BIENVENIDOS
Hábitat da la bienvenida a simpatizantes de todos los orígenes y atiende a las personas que necesitan una vivienda digna independientemente de su raza o religión, edad, sexo, orientación sexual o puntos de vista políticos. Como cuestión de política, los afiliados de Hábitat para la Humanidad no hacen proselitismo. Hábitat no ofrecerá asistencia con la condición expresa o implícita de que las personas deben adherirse o convertirse a una fe en particular, o escuchar y responder mensajes diseñados para inducir la conversión a una fe en particular.
NUESTRA MISIÓN
Ponemos en acción el amor de Dios, Hábitat para la Humanidad une a las personas para construir hogares, comunidades y esperanza.